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Ser hombre transexual.


Tal vez esta nueva entrada no sea favorable para muchas personas, quizá choque de lleno con sus creencias y cree alguna opinión divergente ante lo que planteo. Sin embargo, estoy cansado de escuchar siempre ciertos discursos que no colaboran para que la mayoría de hombres transexuales den un paso al frente.

Es cierto que muchas mujeres transexuales han sido el foco de atención social, la cual bajo su punto de vista patriarcal y cisnormativo, ha tenido el “inmenso” honor de destruir sus vidas y lapidar sus sueños. No obstante, no son las únicas. Los hombres transexuales también hemos hecho historia en el deporte, en la ciencia, en la música, en el arte y en otros medios pero hemos sido olvidados. El motivo principal es porque ellas tal vez han gritado más fuerte, se han sabido entrelazar y afianzar sus historias. Sin embargo, debo poner un “pero”. Hay muchos hombres que fueron represaliados por las cisnormas y que no fuesen escuchados en su momento, que fueran silenciados e invisibilizados, es igual de humillante que un golpe porque genera el mismo sentimiento de impotencia.

La mayoría de hombres transexuales desean las cisnormas porque saben que es su única escapatoria. Y no sólo la cisnorma, sino también la heteronormatividad tanto en sus relaciones sexuales como afectivas. Cualquier expresión de exclusión provoca en la mayoría de casos la huida masiva a una línea menos crítica, menos luchadora, que aboga menos por la libertad y la polémica.

Actualmente he conocido a fondo a muchos hombres transexuales muy diversos, pero todos vinculados, a modo de cordón umbilical, a unas necesidades que no son resueltas y tampoco son visibilizadas de forma constante.
Los hombres transexuales también somos golpeados, violados, humillados y juzgados. Muchos compañeros silencian esos malos tragos antes, durante y después de ciertas “transiciones” sociales. Lo hacen porque creen que de ese modo pueden escapar del dolor, la soledad o el sentimiento de humillación; pero se equivocan. Sólo se genera en ellos un sentimiento de rechazo, de odio, de depresión continua y rabia. Sobre todo de rabia.
No es que la violencia, la precariedad, etc… sean “menores” entre los hombres, sino que son más invisibles. Hacia las compañeras son más reiteradas, pero cuando se realizan a compañeros son iguales de violentas.
Conozco casos de violación a compañeros, de malos tratos dentro de las relaciones no cisheteronormativas, o simplemente momentos de confrontación con otros compañeros que niegan estas realidades. El machismo, lo que podemos vincular a dos vertientes en el heterocispatriarcado y el gaycispatriarcado, a veces es tan aplastante que provoca que chicos trans digan ser heterosexuales y/o cisgéneros para que ni siquiera dentro del colectivo LGTBIQ+ sean observados con lupa. Y ni que decir de como se muestran algunos hombres transexuales heterosexuales cuando aparece un chico trans no heteronormativo y/o cisnormativo. Se generan rumores, insultos, violencia física incluso, etc…

Detesto a la mayoría de youtubers trans, sobre todo a los hombres trans. Detesto a esas personas, aunque jamás las insultaría o humillaría. Detesto el contenido de sus palabras, el mensaje heteronormativo y cisexista que usan, cuando se habla a los jóvenes trans que intentan conocerse mejor a sí mismos. El mejor ejemplo para ser un hombre es uno mismo, pero los adolescentes están muy influenciados por la imagen en las redes sociales, por la influencia que pueden tener ciertos “ejemplos” y los deseos que imponen padres, familiares, amigxs, compañerxs…

Por ser transexual no tengo porque ser heterosexual. Por ser hombre transexual no tengo porque salir con mujeres. Por ser hombre transexual no tengo que dejar de ver ciertas series, hacer ciertos deportes, acudir a ciertos eventos o usar ciertas prendas de ropa. Mi hombría no se ve debilitada ante mi sentimiento romántico hacia un hombre. Mi hombría no se ve limitada al uso de ropas menos floridas o en la categoría de “ropa de hombre” en las grandes superficies…

En resumen… las violencias no se cuentan porque no hay unión entre los hombres, por eso quedan vedadas y sólo se habla de las violencias de las mujeres trans como el gran foco. Las mujeres tienen más valor porque entre ellas se ayudan y entre ellas rompen mitos, muros, fantasmas… Del mismo modo que veo entre las mujeres cis lo veo entre las mujeres trans, aunque siempre hay excepciones. Si bien, entre hombres trans… o simplemente entre hombres (cis o trans) no veo unión, sino competencia y “huida” hacia la comodidad, pues están cansados de sufrir. No olvidemos que se nos ha leído como mujeres durante años, que hemos sentido mucho miedo cuando caminamos solos por las calles antes de “la transición” o durante “la lectura como mujer”. No olvidemos que aún hoy muchas veces el machismo garrulo nos destroza. Por eso no salimos a la luz, no decimos quienes somos y tampoco veo cohesión como entre las mujeres.

Los espacios mixtos de ayuda entre hermanxs trans es maravilloso, pero a veces he tenido que hablar en privado con varios compañeros porque tenían dudas de temas de diversidad sexual dentro del colectivo trans… Esa información ha llegado a través de mí gracias a que a mí no me da vergüenza decir que soy homosexual además de transexual. Esa información llega porque digo lo que siento en cada momento… ¿Me granjeo enemigos? Obviamente. Hay muchos rumores sobre mí, pero merece la pena. Si logro que algún hombre trans se sienta menos confuso sobre la libertad, que pueda expresar las violencias que ha vivido o vive, o que simplemente se sienta escuchado… Disculpen, pero me importa ya muy poco lo que puedan decir a mis espaldas. Sé que la mayoría son hombres lo que lo hacen y es porque sienten su hombría dañada ante ejemplos no cisnormativos y no heteronormativos por el motivo que sea. Tampoco me importa si encuentro o no apoyo dentro del colectivo cuando me atacan, pues durante mucho tiempo he sido el lobo estepario. Además, sé de compañeros que han abandonado su visibilidad porque han sido rechazados o se han sentido rechazados por otros hombres transexuales. Por lo tanto, sé de lo que hablo. Así que sólo queda añadir: No estáis solos. La diversidad sexual y romántica dentro del colectivo trans existe, así como las nuevas masculinidades lejos de la masculinidad tóxica por la cual muchos abogan. 

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