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No hay que olvidar, hay que reparar


Mar Cambrollé va donde la solicitan, donde desean escuchar una voz trans y no dejar que se apoderen cisgéneros (aunque sean LGTBIQ+), y siempre para que se haga visible la transexualidad, la necesidad de ciertas leyes, la carencia que hay en distintas zonas de España, las diferencias entre países y, sobre todo, la historia que parece “olvidada”...

"Represión de mujeres Trans y Lesbianas en el franquismo" es una ponencia que ha impartido con éxito en los Cursos de Verano de la Universidad de Jaén, organizados por la Fundación Internacional Baltasar Garzón.

Muchas personas cisgéneros gay se apoderan del dolor de las mujeres trans durante el franquismo diciendo que eran homosexuales. No señor. Un homosexual puede ocultar su sexualidad. Inclusive en esa época solían casarse, irse a otros países o simplemente pasar desapercibidos por completo. Una identidad es difícil de ocultar. “El mariquita” era más bien la persona trans, binaria o no, que se veía señalada porque no era capaz de ocultar sus necesidades de expresión de su identidad. Unos tacones, una falda, un poco de maquillaje o inclusive la ropa catalogada de “masculina” en hombres trans provocaba revuelo, señalaban a estas personas y acababan, como pasaba en muchos penosos casos, en la cárcel.

No hay que olvidar jamás este dolor. ¡Hay que reparar! Por eso agradezco en el alma que personas como Mar Cambrollé u otrxs compañerxs hablen de este tema. Erik García ya lo hizo en las pasadas Jornadas Trans que se celebraron en Diciembre en Sevilla con "El borrado trans".

Os dejo además este vídeo:


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