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Visibilidad en las Fuerzas Armadas: Felicidades Carolina Meléndez


Cuando se habla de visibilidad no se pide actores, cantantes o gente de la farándula. Se pide que cualquier persona perteneciente al conglomerado social en el cual vivimos, tan diverso y rico en matices, alce la voz y de un paso adelante diciendo: Soy transexual. Somos demasiados, pero se nos ha borrado u “olvidado a conciencia” para hacer creer patéticamente que somos un “bomb” o “novedad”.

A pesar que es NAUSEABUNDO el lenguaje periodístico de este panfleto, pues aún se puede leer mensajes transfóbicos “cuando era hombre” o “cambio de sexo”, tengo que hacerme eco de la noticia y ofrecer a todas las personas trans lectoras de mi blog la información. Reportaje Noticia

El ejército es duro para una mujer cisgénero, pero aún es peor para una mujer trans. Las mujeres están denigradas, humilladas, vilipendiadas y también han sido violadas o golpeadas en manadas de compañeros que han decidido que son inferiores y su lugar es “la cocina”. El machismo, la cisnormatividad y heteronormatividad junto a un estricto conflicto contra cualquier pensamiento revulsivo para la institución militar es algo habitual.

La protagonista de nuestra noticia se llama Carolina Meléndez y ha ascendido al mayor rango en escala de suboficiales: Suboficial Mayor en las Fuerzas Armadas Españolas.



En el twitter de la Armada Española se anunció a bombo y platillo el 22 de Marzo el logro de esta mujer. Su imagen es sin duda un símbolo de logro, lucha y poder. El motivo que es logro, lucha y poder es porque las mujeres están ninguneadas en el ejército, la lucha es porque ha tenido que comprenderse a ella misma y combatir contra los prejuicios del día a día -dentro y fuera de su profesión- y de poder porque demuestra que se puede y que somos tan capaces como cualquiera en aspirar a cualquier puesto si nos lo proponemos. Somos gente válida, capaz y visible.

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